Este miércoles empieza la Semana del Agua y los festejos de los 77 años de la creación del Departamento de Hidráulica estarán cubiertos por una nube de preocupación. Es que San Juan se enfrenta a la tercer peor sequía de los últimos 110 años, que son los que cuentan con mediciones.
El río San Juan traerá sólo 600hm cúbicos, según los primeros datos que quedarían confirmados con el pronóstico hídrico que publicarán en los próximos días. La provincia necesita alrededor de 1250hm3 para consumo humano y riego, por lo que más de la mitad del agua que se use durante este año saldrá de las reservas de los diques.
Si bien está asegurada la cantidad de recurso durante la temporada y la racionalización no será tan abrupta, los diques sufrirán una merma y además será necesario cuidar el agua pensando en que el 2020 tiene muchas posibilidades de ser otra temporada de sequía. Las bajas nevadas y lluvias podrían extenderse con la llegada de el fenómeno de El Niño, sumándose así a los años secos que se acumulan desde 2017.
En una entrevista a Canal 13, el director de Hidráulica Maximiliano Delgado aseguró que ya están hechos los planes para el uso de agua durante el verano 2019 – 2020. Los regantes serán los primeros en tener que ajustar el cinturón y para esto ya han hecho reuniones en las que acordaron aumentar de 95 a 98 o incluso 100 los días de corta. Eso sí, los productores e Hidráulica acordaron que esta merma será durante los meses de abril a junio, para beneficiar los cultivos estivales.
El consumo humano no se vería afectado durante la temporada e incluso la distribución de agua se hará de tal manera de que la cota del Dique de Ullum se mantenga alta hasta febrero. Esta última medida se debe a que el área que dirige Delgado tuvo en cuenta “el calor de los meses estivales y la necesidad de muchos sanjuaninos de tener un lugar donde refrescarse aun cuando no pueden irse de vacaciones”. A partir de febrero empezarán a el agua del embalse ullunero, ya que no quieren afectar sólo a Punta Negra y Caracoles, sino que buscan que ningún reservorio baje de su cota mínima.
Aun así, la premisa durante los próximos meses será cuidar el agua entre todos, ya que será excepcionalmente poca.