Frente al descalabro en las cuentas que heredó de la gestión de Marcelo Marinero, el nuevo intendente de Iglesia, Jorge Espejo, hará cirugía en los cargos políticos del Ejecutivo. La anterior administración le había dejado un staff de 59 funcionarios y el jefe comunal aseguró que tendrá, como mucho, un total de 42, es decir, hará un recorte cercano al 30 por ciento. De hecho, a 18 días de su asunción, recién está trabajando con 27 personas en el plantel político, lo que representará un ahorro de 3,5 millones de pesos cuando pague los salarios de ese sector. Aunque Espejo aclaró que necesitará cubrir lugares en áreas importantes, pero solamente hasta llegar a los 42 puestos.
El intendente comenzó su mandato con ahorros en el plano político debido a que había asegurado que su predecesor le había dejado el municipio “fundido”, al punto de que había afirmado que “no puedo pagar nada”. De esa manera, los salarios corrían riesgos. Pero con el correr de los días, Espejo obtuvo una ayuda del Gobierno provincial de 10 millones de pesos del Fondo de Emergencia Municipal (FEM), la cual se depositó a fines de esta semana. Con esos recursos, más unos 5 millones de pesos de coparticipación que ingresaron desde el 10 de este mes, sin contar los últimos días de diciembre, resaltó que pudo abonar el sueldo y el aguinaldo de los 166 empleados de planta permanente, al igual que lo que faltaba por desembolsar al anterior plantel político. En cuanto al universo de contratados, que muchos terminó bajando Marinero, el jefe comunal había indicado que está realizando el relevamiento sobre quiénes cumplían tareas y en qué lugares, por lo que destacó que les había manifestado que “recién podremos pagar en enero”.
Frente a esa situación, Espejo remarcó que están haciendo ahorro en movilidades, combustibles y gastos corrientes, a lo que se suma el recorte en la planta política. Por eso, bajará un total de 17 cargos y cambiará Direcciones por jefaturas de Departamento para lograr ahorros.
