Desde el 31 de agosto de 2018, el sacerdote sanjuanino denunciado por abuso sexual -Walter Bustos- permanece detenido en el Penal de Chimbas y, a 18 meses de que estallara el escándalo con semejante acusación contra un miembro de la Iglesia Católica de la provincia, está a punto de ser liberado por decisión de un tribunal superior, a pesar de que el juez que investigó la causa lo procesara con prisión preventiva. Sin embargo, la liberación aún no se concreta por lo que el apresado seguramente se relame con ver el sol de frente sin la sombra de los barrotes.
Según explicaron altas fuentes judiciales, antes de que la excarcelación sea efectiva se deben cumplir ciertos pasos procesales para que el fallo de la Cámara de Apelaciones se ejecute, cuyo dictamen atenuó la imputación contra el párroco de Angaco que había determinado el titular del Tercer Juzgado de Instrucción, Guillermo Adárvez. En su resolución, el magistrado lo había procesado por abuso sexual gravemente ultrajante en tres hechos pues para él, el religiosos investigado por agredir sexualmente a las presuntas víctimas cuando eran menores de edad, uno de ellos lo sigue siendo, sí fue responsable de los delitos por los que se lo acusa.
No obstante, la defensa del cura conocido como el ‘Padre de los jóvenes’ -representada por Juan Bautista Bueno- presentó un recurso de casación ante la Sala I de la Cámara de Apelaciones Penal y, tras revisarlo, su tribunal revocó el fallo y cambió la calificación contra Bustos a abuso sexual simple, agravado por el grave daño a la salud psíquica de dos de los tres denunciantes, ya que por el abuso del mayor de los hermanos, sus sobrinos, fue sobreseído. Esta modificación permite el beneficio de la excarcelación por tratarse de un delito menor.
Si bien Adárvez debe acatar la resolución que trascendió hace 10 días atrás, primero debe establecer ciertas medidas para que el sacerdote recupere la libertad como fijar una fianza bajo caución real -es decir con dinero o algún bien de valor como garantía- o bajo palabra, si considera que no existe ningún riesgo de fuga. A su criterio también quedarán otro tipo de órdenes judiciales vinculadas al caso, como prohibiciones de acercamiento y demás imposiciones para el acusado.
Por su parte, la Fiscalía que ya se había opuesto a la excarcelación -al igual que el juez de instrucción, quien rechazó el pedido de la defensa- indicó que el proceso puede llevar un tiempo considerable para que el acusado salga detrás de las rejas. De lo que sí se mostró seguro el representante del Ministerio Público fue de la elevación a juicio del expediente. “La causa está encaminada a eso, estamos trabajando con el requerimiento de elevación a juicio. En estos casos tan delicados la justicia debe dar una respuesta inmediata y eso es lo que se ha tratado de hacer con un serio trabajo en la instrucción por parte de Adárvez”, sostuvo el fiscal Renato Roca.