Con una serie de allanamientos, la Policía neuquina dio un certero golpe contra el crimen organizado, a raíz de una investigación que se inició en San Juan por el millonario robo en un edificio céntrico de calle Santa Fe casi Entre Ríos, a una cuadra de la Central de Policía, el pasado 21 de febrero. Además de los elementos secuestrados, demoraron a siete personas que fueron trasladadas a sede judicial. Efectivos sanjuaninos están en el sur argentino, en Río Negro y Neuquén, desde hace varios días, quienes proporcionaron datos claves para dar con los presuntos autores del delito.
Por otro lado, se espera conocer las resultas de la investigación en la provincia de Río Negro, donde al menos habría secuestrado un vehículo y otros elementos.
Entre dólares y pesos, se llevaron poco más de $10.000.000 al vaciar 7 oficinas del conocido edificio Derby
Personal del Departamento de Delitos contra la Propiedad y Leyes Especiales de Neuquén realizó ayer ocho diligencias judiciales en el Oeste de Neuquén en las que lograron secuestrar una importante suma de dinero en efectivo, drogas, armas de fuego, municiones y diferentes elementos vinculados a la investigación, entre los que se destacan prendas de vestir y documentación.
Desde la Policía informaron que los operativos tuvieron lugar en el marco de una investigación por robo en el que interviene el Segundo Juzgado de Instrucción de San Juan, a cargo de la Mabel Moya y emanadas por el juez de turno Cristian Piana de Neuquén. Los demorados estarían vinculados al crimen organizado, dedicándose a diferentes tipos de delitos.
El resultado de los allanamientos en el oeste neuquino fue contundente: secuestraron aproximadamente 370.000 pesos, 26 dólares, 9 celulares, cinco plantas de marihuana de entre 90 centímetros y 3 metros de altura, seis equipos de pre-frío, como así una caja porta valores conteniendo en su interior un trozo de ladrillo de cannabis sativa y varios envoltorios de la misma sustancia.
Además, encontraron varios envoltorios con marihuana, una equipo de radio tipo inhibidor de señales, un arma de fuego de fabricación casera, otra arma de fuego tipo carabina calibre 22, un estuche de plástico con municiones de diversos calibres, un equipo DVR, tarjetas bancarias y documentación; una computadora con información y dos pendrives, un televisor, un equipo inhibidor, prendas de vestir y 66 llaves de diferentes formas y diseños.
Pero los elementos secuestrados fueron aún más. La Policía también incautó aberturas (tres ventanas, dos puertas corredizas, una puerta de frente), un termotanque de 80 litros, diferentes artefactos de baño, cañería de agua, gas, un tanque de agua, una gran cantidad de bebidas tales como gaseosas, jugos, vinos, soda, leña, carbón y un freezer.