Un interno de 34 años falleció este lunes. Había sido baleado el viernes pasado; su familia denuncia que no recibió la atención médica que correspondía. En medio de este episodio, reclusos reclamaron por las condiciones en las que se encuentran detenidos.
La muerte de un preso en el Establecimiento Penitenciario N°9 (EP9) de la Ciudad de Córdoba, en condiciones que aún no fueron establecidas, generó disturbios y protestas por parte de otros internos y familiares del recluso.
El hombre, identificado como Maximiliano Miranda, de 34 años, falleció este lunes al mediodía en la enfermería del EP9, conocido también como la Alcaidía. Según informaron desde el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la provincia, el deceso se produjo tras una descompostura.
La Justicia de turno inició una investigación para determinar cómo fue la muerte del interno.
El hombre había sido baleado el viernes pasado, según relató la familia, «en una pelea de bandas y cuando quisieron asaltarlo». Tras el episodio, Miranda fue trasladado al hospital Elpidio Torres y, posteriormente, al centro de detención que funciona en el barrio Cáceres de la Ciudad de Córdoba.
Sus familiares denuncian que no recibió la atención médica adecuada. «Estaba sangrando por el impacto de bala, no tenía por qué estar acá, tiene que estar en un hospital, si no tienen enfermeros ni una caja con gasas, ni alcohol. No le dejaron pasar los antibióticos ni los remedios que estaba tomando. Les dijo que se sentía mal y lo dejaron, es abandono de persona», relató su padre.
El EP9 depende y es custodiado por el Servicio Penitenciario de Córdoba (SPC), fuerza que depende del Ministerio de Justicia provincial. Allí se aloja a los presos detenidos por la Policía y con causas abiertas por la Justicia.
En medio de este episodio, presos denunciaron hacinamiento en las celdas, malas condiciones edilicias y sanitarias y hasta represión por parte de algunos penitenciarios.
Sin embargo, la secretaria de Organización y Gestión Penitenciaria de Córdoba, Cecilia Lanzarotti, aseguró que previo al ingreso de Miranda a la Alcaidía, se realizó el mismo procedimiento que se realiza habitualmente con todos los internos.
«Se constata si puede permanecer alojada o no en el establecimiento. Fue asistido recibiendo las curaciones y la indicación farmacológica correspondiente. Hoy lamentablemente falleció y algunos internos en señal de protesta generaron algunos disturbios que fueron controlados, no teniendo que lamentar heridos ni en la fuerza ni entre los aprehendidos», explicó.
