Un grupo de Medio Oriente se la quedó por casi 9 millones de dólares. La angustia del argentino que estuvo a 17 segundos de comprarla.
e acabaron las especulaciones. Y las ofertas. Una de las camisetas más emblemáticas -quizás la más icónica- de la historia de los Mundiales, la azul de la Selección Argentina que usó Diego Maradona en el Mundial de México 1986 para hacerle los goles a Inglaterra, se subastó por 7.148.500 libras esterlinas, lo que equivale a 9 millones de dólares aproximadamente.
Se trata de una cifra récord para una camiseta de fútbol. Si bien el sitio británico de subastas Sotheby’s, que llevó adelante la venta de manera online, no dio a concer el nombre del nuevo dueño de la camiseta, un argentino que ofertó reveló que el comprador habría llegado desde Medio Oriente.
“Una oferta de Medio Oriente llegó a último momento y nos sacó la ilusión”
El argentino Marcelo Ordas lidera el grupo Legends, una empresa privada que tiene la mayor colección de camisetas usadas del mundo. Él, junto a una delegación argentina, se encontraba en tierras británicas para hacerse con la camiseta y traerla al país. De hecho, había hecho la mejor oferta hasta el momento, por una suma de 5,5 millones de dólares. Sin embargo, la ilusión se disolvió en un puñado de segundos.
“Esta armadura, esta reliquia era para ser llevada a casa y que todos los amantes del fútbol mundial la puedan apreciar. Y era la punta de lanza para que hubiera un acervo cultural de la selección argentina más importante de la historia. Pido disculpas, hicimos todo lo que estuvo a nuestro alcance”, dijo Ordas, entre lágrimas, en declaraciones a LN+.
La polémica sobre la camiseta
La subasta comenzó el pasado 20 de abril, luego de que el ex futbolista inglés Steve Hodge, quien la intercambió con el Diez tras aquel partido inolvidable, decidiera desprenderse de la camiseta.
Como casi todo lo que rodea la vida de Diego, cuando se conoció la noticia de la subasta, se desató una polémica porque Dalma Maradona anunció que no era la camiseta con la que su papá había hecho el gol más lindo de la historia de los mundiales, el del “Barrilete cósmico”, y “La Mano de Dios”, sino que se trataba de la casaca que había usado en el primer tiempo. “Conociendo apenas un minuto a mi papá, sabés que esa camiseta no se la dio a nadie. La del primer tiempo, OK, la cambiás porque tampoco sabés lo que va a pasar en el segundo. Esa camiseta (la del segundo tiempo) no la tiene este hombre, pobre”, afirmó.
Sin embargo, con el respaldo de un estudo de autenticación llevado adelante por Resolution Photomatching, una empresa que trabaja en este tipo de procesos, Sotheby’s garantizó que la camiseta efectivamente es la que utilizó el ídolo argentino en el segundo tiempo.