Los choques entre hinchas en la previa del Argentina-México en Qatar 2022 anticiparon que podía ser un partido de alto riesgo. Dos argentinos lo sufrieron en carne propia.
Luis Aguirre es uno de los miles argentinos que, junto a su hijo Federcio, tuvo la posibilidad de vivir el partido entre Argentina y México en el Mundial de Qatar 2022 desde el imponente Lusail Stadium.
Sin embargo lo que comenzó con sufrimiento y siguió como una fiesta tras los goles de Lionel Messi y Enzo Fernández se transformó en una pesadilla para estos dos argentinos. Es que antes del final del partido y cuando el triunfo del conjunto conducido por Lionel Scaloni cuatro hinchas de México los atacaron salvajemente.
“Se acercaron a increparnos. Nos dijeron argentinos de mierda y le pegaron un par de golpes a mi hijo”, contó Luis Aguirre quien además estuvo cuatro horas demorado por las autoridades qataríes. Y siguió: “Caímos al piso y después recibí unas cuantas trompadas en la cara”.
Por los violentos choques entre hinchas mexicanos y argentinos que se habían registrado en los días previos al partido del sábado pasado, el hombre sabía que el encuentro «podía ponerse picante” en algún momento contó razón por la cual antes del partido habían hablado entre los conocidos con quienes iban a ir a la cancha para no caer en ninguna provocación ni verse envuelto en ninguna pelea.
Aguirre fue trasladado primero a un servicio médico para las curaciones básicas de su rostro, visiblemente afectado por los golpes, y luego fue encerrado con su hijo cuatro horas en una habitación, aislados, donde les tomaron declaración a ellos así como también a los mexicanos.
“También hubo una videollamada con un fiscal de Qatar”, agregó el hombre y contó: “Este es mi cuarto Mundial, creo que hubo una desorganización importante de FIFA. Esto no debería pasar cuando uno viene a ver un partido de fútbol de este nivel».
“Dentro de la situación estoy bien, podría haber sido peor”, concluyó.
