Uno de los últimos candidatos presidenciales que se acercó a las urnas a emitir su voto fue Mauricio Macri. El actual mandatario, que va por la reelección, arribó a las 12.20 -tal como estaba previsto- a la escuela N°16 Wenceslao Posse, ubicada en el barrio porteño de Palermo, y acompañado por un grupo de seguidores que lo apoyó entonando el ya clásico “Sí se puede”, cumplió con su deber cívico.
“Se juegan dos visiones de futuro”, indicó el líder de Juntos por el Cambio sobre la importancia de las Elecciones.
El presidente se mostró entusiasmado al referirse a la participación del electorado. “Creo que va a haber más participación que nunca antes, al menos en varias décadas”, sostuvo y aseguró que “hay récord de votantes en el exterior”.
Por otro lado, remarcó más de una vez que espera que se viva una jornada con “tranquilidad” y llamó a calmar la ansiedad a la espera de los primeros números. “Los bocas de urna no tienen rigor científico”, dijo Macri tras anunciar que los votos “se conocerán después de las 21.00” y si los resultados son parejos “habrá que esperar más”.
“Espero estar mañana trabajando temprano en la Casa Rosada por el futuro de los argentinos como corresponde, en cualquier escenario”, concluyó el presidente, que se irá a la quinta Los Abrojos a almorzar con sus hijos y luego partirá a Olivos a la espera de los resultados.