Le dicen La Mamu y era la encargada de captar a las víctimas y venderles una vida llena espejitos de colores como promotoras en carreras de automovilismo. Aunque todo era una mentira y terminaba en la prostitución. Claro que no sin antes pasar por “la prueba” ante El Viejo, el dueño de una concesionaria muy importante de Pilar y quien financiaba la oferta sexual para quienes participaban del Turismo Nacional (TN).
Así funcionaba la presunta red de trata investigada por la Justicia y que fue desbaratada este domingo al mediodía en los boxes del autódromo Juan Manuel Fangio de Rosario, en el marco de la 11° fecha del TN, según informó el diario Clarín.
Los ruidos de los motores copaban el sonido ambiente este domingo al mediodía en el autódromo de Rosario mientras los agentes de la Policía Federal hacían lo mismo en los boxes: buscaban a La Mamuy a su chofer, el facilitador. Y allí los encontraron y los detuvieron.
“A El Viejo, propietario de una concesionaria del kilómetro 51 de la Panamericana, a la altura de Pilar, lo arrestaron en Buenos Aires: “No pudo llegar a la carrera porque tuvo problemas con su avioneta”, explicaron las fuentes.
“Se logró liberar a 15 chicas que estaban bajo el dominio de esta mujer que las contrataba como promotoras o paragüeras y, luego, las obligaba a prostituirse”, indicaron las fuentes.
Y añadieron: “Generalmente, las jóvenes eran del interior del país y muy vulnerables, por lo que las extorsionaban con dejarlas sin trabajo si no accedían a ofrecerse a los clientes”.
Toda esta información consta en la causa que comenzó con una denuncia anónima en la fiscalía federal de la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (Protex).
“La causa tiene varias escuchas telefónicas en donde se oye cómo La Mamu organizaba los eventos (encuentros) con los clientes. Todos eran durante los días que involucra la fecha del Turismo Nacional, ya sea la clasificación y la carrera, y vendía a las chicas con nombres de autos”, describieron las fuentes.
El chofer de La Mamu, conocida en el ambiente como una empresaria que manejaba promotoras, eran quien, según la investigación, llevaba a las víctimas a la ciudad donde se corría la fecha y era el “facilitador” ante los clientes.
La investigación comenzó con una denuncia anónima en la Protex y, tras varios meses, derivó en un operativo en el autódromo rosarino que fue ordenado por la secretaría N° 12 del Juzgado Criminal y Correccional Federal N° 6, a cargo de Rodolfo Canicoba Corral.
Hasta allí llegaron este domingo los oficiales de la Federal para detener a La Mamu y a su chofer, mientras otros agentes hacían lo mismo con El Viejo en Buenos Aires.
Las 15 víctimas que estaban bajo el ala de los tres detenidos fueron entrevistadas por los agentes y quedaron bajo la protección de la fiscalía especializada en trata.
De los clientes, los que pagaban a cambio de sexo, ninguno fue acusado ni detenido.