El Tribunal de Cuentas resolvió no aprobó la cuenta 2017 de la gestión de la Municipalidad de la Capital y ahora, un exfuncionario y un empleado deberán responder con su patrimonio. El motivo: el pago indebido de haberes por $730 mil al conocido exfuncionario Jorge Rosales mientras estuvo de licencia sin goce de sueldo. Paralelamente, el tema está siendo analizado por la Justicia.
Apenas se enteró, el gobernador Sergio Uñac puso el grito en el cielo y echó a Rosales del Copesj. En la Capital, la administración del intendente Franco Aranda firmó con el involucrado un convenio para que devolviera en cuotas lo que percibió en forma injustificada. Pero el acuerdo fue rechazado por el Tribunal de Cuentas por distintos defectos y tras un recurso de reconsideración presentado por el municipio, bochó el ejercicio 2017.
El fallo condenatorio salió con la firma del presidente del Tribunal de Cuentas, Isaac Abecasis, y los vocales Aldo Molina y Enrique Conti, mientras que Laura Yanzón y Graciela Chaves votaron por la aprobación. Entre otras cosas, los tres primeros advierten que el monto del convenio de pago es menor al daño real a las cuentas municipales y que el mismo no garantiza que el dinero sea recuperado, como sí pasaría declarando la responsabilidad patrimonial y avanzar con “un simple cobro de pesos” en la Justicia a través de la Fiscalía de Estado.