Una misión del Fondo Monetario Internacional (FMI) llegará este miércoles a Buenos Aires para revisar las cuentas públicas y dialogar con funcionarios, empresarios y analistas financieros, con vistas a la renegociación de la deuda de U$S 44.000 millones contraída por el gobierno de Mauricio Macri que el país mantiene con ese organismo multilateral.
La delegación del FMI estará presidida por el encargado del Caso Argentino, Luis Cubeddu, quien ya desempeñó ese mismo cargo pero en 2002, cuando el gobierno nacional renegoció la deuda bajo la presidencia de Néstor Kirchner y con el entonces ministro de Economía, Roberto Lavagna.
En un comienzo, la misión iba a estar hasta el viernes en Buenos Aires pero debido a la necesidad de recabar más datos, también dentro del sector privado, con consultoras, bancos y empresarios, extendieron hasta el miércoles de la semana que viene su estadía.
El Fondo no incluyó a la Argentina en su reporte económico mundial difundido a fines de enero hasta realizar un “pronóstico más certero“, teniendo en cuenta que el Gobierno está en su etapa inicial, dijo Werner.
En base a esto, el FMI mantuvo tal como estaban en octubre último las proyecciones del país, cuando estimó una caída de 1,3% del Producto Interno Bruto (PBI) para el 2020 y un repunte de 1,4% en 2021.
Entre esa declaración y esta visita, Guzmán se entrevistó el martes de la semana pasada en Roma con la directora del FMI, Kristalina Georgieva, y al término del encuentro el ministro dijo que intercambiaron “opiniones sobre el programa económico en marcha, distinguiendo entre medidas para lidiar con la situación actual de emergencia económica, y aquellas para solucionar problemas estructurales de la economía“.
El ex presidente Mauricio Macri suscribió en junio del 2018 un primer acuerdo con el FMI por unos U$S 40.000 millones, pero ante los incumplimientos de su gobierno y la corrida cambiaria se decidió realizar un segundo entendimiento, esta vez por U$S 57.000 millones.
El FMI llegó a desembolsar unos U$S 44.000 millones desde el 2018 hasta agosto de 2019, cuando detuvo el envío de fondos luego del resultado de las elecciones Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) que le dieron el triunfo provisorio al presidente Alberto Fernández.