Posibles beneficiarios del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) denunciaron haber sido estafados mediante llamados telefónicos en los que supuestamente les indicaban qué hacer para cobrar el bono de $10.000 de la Anses.
Los hicieron ir a un cajero automático para ingresar datos y luego les pedían depósitos de hasta $60.000.
Lo mismo ocurrió con comerciantes a los que les informaron que debían actualizar su información para cobrar a través de los canales digitales. También les hicieron hacer depósitos para “corroborar que todo estaba bien”. Al menos 3 comercios fueron estafados en $280.000.
En la sección Defraudaciones y Estafas de la Central de Policía trabajan para identificar quiénes están detrás de la red delictiva que actuó durante el fin de semana y estafó por lo menos a 6 personas, 3 de las cuales son potenciales beneficiarios del bono de $10.000 que entrega el gobierno.
En un caso a las víctimas las hicieron depositar $39.000 y $19.000 en la tarde del sábado, previo a hacerles sacar préstamos. En otro a una persona le solicitaron depositar $40.000. Y en otro, $60.000.
Desde la dependencia policial advierten a quienes deben hacer trámites previsionales o de asistencia en la Anses que nada se hace por teléfono, sino solo a través de la página oficial del organismo. Tampoco nadie debe visitarlos en su domicilio, aunque muestren aparentes identificaciones. Y piden denunciar inmediatamente.
También a comerciantes
Las autoridades policiales al mando del oficial principal Demetrio Illanes detallaron más casos: delincuentes que recurrieron a llamados con números de San Juan, Córdoba y Buenos Aires para engañar a comerciantes. Les pidieron que actualizaran sus datos para hacer sus cobranzas con los medios digitales de pago y los posnet.
Así consiguieron información personal y hasta de tarjetas de crédito para “certificar que el dinero iba a sus cuentas”. Pero todo resultó ser falso y hubo quienes hicieron grandes depósitos.
Los damnificados que hicieron las denuncias son propietarios de 2 farmacias (una de Concepción y otra de Santa Lucía) y una ferretería.
Uno depositó $100.000 siguiendo las indicaciones que le daban por teléfono. Y lo mismo totalizó otro, mediante 2 depósitos: $70.000 y $30.000. El tercero mandó $80.000.
Ante estas situaciones desde la policía recomiendan no hacer ningún tipo de gestión telefónica y solo utilizar los canales oficiales y las páginas de cada servicio.
También indicaron que los bancos hacia donde se hicieron las transferencias bancarias brindaron datos de las personas que figuraban como titulares de esas cuentas y ya se ordenaron las capturas pertinentes