En medio de la investigación por una denuncia de una familia que supuestamente fue agredida por los efectivos de la Comisaría 23ª en Rivadavia, esta semana removieron a los jefes de esa seccional.
Luis Martínez, jefe de la Policía de San Juan, contó que esto se debe a un “reacomodamiento” dentro de esa dependencia policial. Al mismo tiempo negó que la decisión haya pasado por la denuncia de la familia Richard en el Rivadavia Norte.
“Son reacomodamientos acorde a los ascensos que hemos tenido en el último tiempo. Se van realizando de manera paulatina. No tiene nada que ver con lo que ocurrió con la familia que denunció violencia”, dijo Martínez.
Foto: archivo DIARIO HUARPE.
Marisa Bustos era la comisario inspector a cargo de esa seccional. Ahora quedaron al frente de la seccional los comisarios Abenamar Díaz y Julio Aballay.
Sobre la investigación del operativo policial, Martínez dijo que eso está bajo la órbita de la Justicia. En cuanto a los policías apuntados por la familia Richard, el jefe señaló que sobre esa guardia de efectivos está trabajando la Subsecretaría de Control.
QUÉ DIJO FLAGRANCIA
El Fuero de Flagrancia sobreseyó el jueves 4 de mayo a 3 de los integrantes de la familia que acusó violencia policial en un operativo en el Barrio Rivadavia Norte durante la noche del martes 2 de junio. Se trata del padre de familia, Américo Richard y 2 de sus hijos: Florencia y Franco Nahuel. La Justicia entendió que en el momento del hecho ellos estuvieron dentro del departamento cumpliendo con el aislamiento obligatorio por la pandemia del coronavirus.
Sobre los otros 2 señalados: Juan Ignacio Richard y Andrés Emanuel Cuevas, el juez Iván Grassi le otorgó la suspensión de juicio a prueba por el término de 1 año y a cambio tendrán que realizar tareas comunitarias en la Municipalidad de Rivadavia por el transcurso de 2 meses. Serán jornadas de una vez a la semana, dos horas diarias.
SIGUE LA INVESTIGACIÓN
Tras la resolución de Flagrancia, Control y Gestión comenzó a tomar testimonios de la familia, vecinos y policías. Esa ronda no terminó por lo tanto la investigación continúa abierta sin ninguna resolución. En un principio Gallastegui contó que la resolución iba a estar en menos de 2 días, pero eso se demoró. En el medio surgió este cambio en la jefatura que encendió las alarmas sobre todo por los hechos que apuntaban a esa seccional.
Foto: archivo DIARIO HUARPE.
EL HECHO
Todo sucedió en el Barrio Rivadavia Norte terminó con la denuncia de una familia contra los efectivos de la Comisaría 23ª por golpes. Florencia Soledad Richard, de 29 años, le contó a DIARIO HUARPE que en el departamento de ese complejo habitacional viven 6 personas. Como es una planta alta comparten un parrillero en un espacio común con otros vecinos.
“Tipo 21 horas mi hermano con mi novio empezaron a hacer el fuego para un asado. Una hora después un vecino de la planta baja puso al lado otra parrilla porque era su cumpleaños. Pasaron unos minutos y empezaron a caer personas con hieleritas y bebidas. Se ve que uno de los vecinos denunció con total derecho porque era una juntadera importante”, narró.
A raíz de esta reunión de personas, alrededor de las 23 horas llegaron 6 u 8 oficiales de la Policía. La joven afirmó que ante esto su padre “trató de bajar para dar explicaciones y lo tiraron al piso”. “En eso bajó mi mamá y al ver la violencia se desmayó, pero los policías le pasaron por encima y la pisaron. Entonces mi hermano se sacó y les dijo ‘están pisando a mi mamá, date cuenta’. Pero los policías no escuchaban razones”, dijo.
Todos los involucrados terminaron en la Comisaría 23ª, a unos 200 metros de donde vive la familia Richard.
Fuente: Diario Huarpe.
