Por primera vez en siete meses y ya cerca del millón de casos detectados de Covid-19 en el país, cifra que se alcanzó en las últimas horas, el Presidente no recibiría a los asesores horas antes de un anuncio sobre la continuidad de la cuarentena desde la llegada de la pandemia por el nuevo coronavirus. La última reunión virtual del Comité de Expertos Covid-19 (COE) había sido el sábado anterior, a principios de este mes, y, unos días antes, algunos habían sido convocados a la Casa Rosada.
Lejos quedó aquella foto oficial del 23 de abril pasado, en el parque de la Quinta de Olivos, con el grupo de expertos convocados por el Gobierno posando junto a los funcionarios. Hoy, cuando la Argentina acaba de atravesar el umbral del millón de infectados y es el país con más muertos diarios por millón de habitantes, su rol se mira de manera crítica. ¿Sirvió la cuarentena temprana y prolongada decretada por el Gobierno y recomendada por ellos? ¿Fue la estrategia de testeos la correcta?
“No formamos parte del Gobierno, no gobernamos, no decidimos, solo damos opiniones, sugerencias que a veces son tomadas y otras veces no. Trabajamos ad honórem; para renunciar, como piden algunos, primero nos tienen que contratar. Ponemos a disposición artículos, novedades científicas y cuando nos reunimos con las autoridades sanitarias intercambiamos opiniones. Es el Gobierno el que toma las decisiones, no nosotros”, dijo Pedro Cahn, director científico de la Fundación Huésped, en diálogo con LA NACION.
A siete meses del primer caso de Covid-19 informado en el país, algunos de los miembros del comité aceptaron hacer una evaluación de su desempeño y, en algunos casos, también una autocrítica. El resto se excusó de participar o no respondió.
“No recuerdo que le hayamos dado al Gobierno una sugerencia que sea equivocada. Hemos sido bastante prudentes en general, recomendando algunas acciones que no siempre se llevaron a cabo”, opinó Cahn.
Para él, si el confinamiento no hubiese comenzado en marzo “hoy habría cuatro o cinco veces más muertos porque no hubiesen alcanzado las camas” ya que durante los primeros meses de aislamiento se reforzó el sistema de salud de todo el país.Faltó una política más enérgica de búsqueda de contactos porque la cuarentena sola no resuelve el problema.Pedro Cahn
Sin embargo, señaló: “La cuarentena se fue deshilachando por el cansancio o por los mensajes de algunas personas anticuarentena. También faltó una política más enérgica de búsqueda de contactos porque la cuarentena sola no resuelve el problema, habría que haber aislado a los contactos y testearlos para ir adelantándose al virus. No se trata de testear en forma indiscriminada con testeos masivos, sino en la búsqueda de pacientes asintomáticos en ciertos conglomerados”, sostuvo el especialista en VIH-sida.
Fuente: La Nación