La dirigente del PRO, Gimena Martinazzo sorprendió este miércoles con una denuncia contra el diputado nacional macrista, Eduardo Cáceres, por violencia de género. Este jueves, en una entrevista con radio Estación Claridad, dio detalles de lo que consta en la presentación que hizo en la Comisaría de la Mujer.
«Pareja o ex pareja, no tiene nada que ver, acá hay violencia de un hombre hacia una mujer y agravada por el vínculo, de que estamos en un mismo partido, de que trabajamos juntos, y de todo eso», inició su relato.
«Hubo violencia, lamentablemente. No es una situación agradable ni para mí ni para él. Yo llegué a mi casa con marcas y me ve mi hija y explota en llanto», aseguró sobre cómo se inició la denuncia.
La rawsina dijo que «esta violencia se viene dando en reiteradas ocasiones, no de esta manera física, sino de manera psicológica y con un hostigamiento, muchas veces de carácter personal donde no debería meterse un compañero de trabajo pero hay cosas que van a quedar aclaradas en la Justicia».
Aseguró que «ayer hice la denuncia y fuimos al médico legista así que esas marcas están acreditadas con fotos». Anticipó que hoy ampliará su declaración y que peritarán su teléfono «donde tengo o tenía mensajes acumulados, porque el señor Cáceres se encargó de sacarme el teléfono que es por eso que viene el acto de violencia, de quitarme el teléfono y querer revisarlo. Ahí viene su acto de violencia y mi acto de defensa hacia él. Vamos a ver qué podemos recuperar para demostrar este tipo de violencia».
En la entrevista radial sostuvo «hubo golpes y están acreditados. No golpes, a ver, él tuvo una actitud y yo estuve largo tiempo defendiéndome porque él tenía mi teléfono y yo intentaba quitárselo, la verdad que una situación muy incómoda. Antes de ayer no podía ni hablar con mi voz pidiendo auxilio. Ya vamos a contarlo más en detalle luego de la declaración, pero sí hay defensa mía. Tengo los brazos moreteados, la cara un poco lastimada, tengo moretones en las piernas, todo eso ya está registrado».
Cuando le preguntaron si había alguien más presente en la situación respondió que «no, a vos te parece que si hubiera habido una persona hubiera dejado que este señor trate de asfixiarme». Repreguntada sobre si hubo intento de asfixia dijo que «no intento de asfixiarme y matarme pero sí muchas veces estuve casi sin aire pidiendo auxilio para que me pudiera dejar respirar en su afán de tener mi teléfono en la mano».
Cáceres usó las redes sociales para dar su versión, horas después de conocida la denuncia que la misma Martinazzo hizo pública en su cuenta de Facebook. En ese video, el dirigente macrista dice que se puso a disposición de la Justicia e insinúa que detrás de la denuncia de ella hay motivaciones políticas ya que «Gimena es la que me sucede en la banca de diputado nacional». Martinazzo respondió que «la verdad que no me había dado cuenta de eso, que realmente veo que su única preocupación, porque dice ‘creo que esto’, aceptando el tema de la violencia, ‘no va a afectar mi cargo en el Congreso’. La verdad que me quedé helada. Porque veo que lo único que le importa es su tema del Congreso. Y él sí sabía que yo iba a hacer la denuncia».
Consultada sobre por qué hizo la denuncia el mismo día de conmemoración de la lucha de violencia contra la mujer, aseguró que «no fue programado. Fue el día que me pude levantar para poder ir a hacer la denuncia». Y agregó que «no es fácil denunciar. Llevo años de una violencia psicológica importante, con agresiones importantes, hacia mi persona, hostigamiento, de grabarme, de subestimarme, insultos y demás. Es la primera vez que salgo con marcas, que llega a este nivel».
La dirigente dijo que llegó a su casa el lunes y cuando la vio su hija se acercó y le preguntó qué pasó: «las dos estallamos en llanto y me dijo ‘si vos no lo denunciás, lo denuncio yo’. Ese día estuve en cama, el martes no podía moverme, hice cosas que tenía que hacer pero muy en desgano, no tenía voz, no podía hablar por haber estado forzando mi voz pidiendo auxilio y fue al otro día que decidimos con mi hija ir a hacer la denuncia».

Agregó que «tengo un montón de cosas para haberlo denunciado antes, si fuera por el cargo como él dice. Fue determinante la charla con mi hija. Yo peleo mucho por las mujeres y no había coherencia en lo que yo estaba haciendo y en lo que me estaba pasando a mí. Yo lo dejaba pasar, protegía muchas más cosas de las que te imaginás, todas las cosas que se rompieron hoy son las que yo cuidaba. Se rompe una estructura, se rompe un vínculo político, se quiebra algo dentro de nuestro espacio, son muchas cosas las uno cuida, se rompen vínculos sociales Somos las dos personas conocidas, quedamos muy expuestas. Imaginate que tenga que dar mi teléfono a un Juzgado, que me estén revisando mi intimidad».
Concluyó: «Tener que denunciar a una persona que quise mucho, que ha sido en algún momento mi pareja, que hemos trabajado juntos en este proyecto. No es una situación agradable para mí pero esto llegó al límite. No nos merecemos esto de hombres que cuando adquieren poder y creen que manejan mucho más cosas, sobre todo nuestra integridad personal».