Poder brindar una nueva oportunidad, es el mayor de los desafíos. La posibilidad de que cada ciudadano afectado por las adicciones pueda obtener contención por parte del Estado, asistencia en su recuperación y luego las herramientas necesarias para reinsertarse en la sociedad, es el pilar fundamental para la Dirección de Abordaje Integral de las Adicciones, perteneciente al Ministerio de Desarrollo Humano y Promoción Social.
Cada año, personas de todas las edades, logran superar con éxito cada una de las fases de tratamiento, alcanzando el egreso. Esto implica que esa persona ya se encuentra con posibilidades de realizar una reinserción social adecuada y con ello, garantizar un futuro mejor.
Para que esto suceda, la Dirección de Abordaje Integral de las Adicciones cuenta con un amplio equipo de profesionales que, en conjunto con el entorno familiar y social de cada persona en situación de vulnerabilidad, trabaja para que esa persona pueda completar el tratamiento.
Este año comienza con la grata noticia de que cuatro personas lograron dicho egreso, superando esta enfermedad social. Se trata de dos hombres y dos adolescentes mujeres quienes con mucho esfuerzo y esmero pueden ahora alcanzar una mejor calidad de vida.
Es importante destacar que, el aporte brindado por parte del entorno social de cada uno de ellos (en especial de sus familias) fue clave para que pudieran completar con éxito el tratamiento.
Una de las herramientas con las que cuenta la Dirección en pos de brindar nuevas oportunidades, es el convenio firmado junto al Ministerio de Educación y la Asociación Civil FAI a través del cual se busca impulsar que los residentes de las comunidades puedan terminar la secundaria y obtener la certificación pertinente, gracias al Plan Fines.
En ese sentido, ambas jóvenes lograron completar y aprobar el ciclo lectivo 2020. Gracias a esto, María ahora podrá cumplir su sueño de ser profesora de Educación Física, mientras ayuda a su madre en el cuidado de su hermano menor. Por su parte, Lucía comenzará su propio emprendimiento de panificación y una vez concluido el secundario, se unirá a las fuerzas armadas.
En el caso de los varones, ambos mayores de edad, lograron superar situaciones difíciles como el caso de Juan, quien debido a esta enfermedad se ausentó durante un prolongado tiempo de su hogar. Aunque, en los dos casos, la intervención de la familia y el esfuerzo compartido, fueron factores claves para alcanzar esta nueva realidad.
Este esfuerzo tuvo su recompensa para Marcos, quien ahora formará parte del Programa impulsado desde Nación “Potenciar Acompañamiento” en donde contará con un acompañante y recursos para impulsar sus propios proyectos.
El programa tendrá una supervisión de abordaje, esto quiere decir que, será brindado a aquellas personas que lleven al menos seis meses de tratamiento en su recuperación de adicción; y siempre y cuando, el equipo de profesionales a cargo considere que se encuentra en condiciones de tener independencia económica.
Los objetivos que persiguen cada uno de los programas es que toda persona en situación de adicción pueda establecer una red de contención con su familia y su entorno, que recupere hábitos de recreación saludables y una orientación hacia la reinserción social, con un proyecto de vida sano, entendiendo que de las adicciones se sale acompañado.