Tiene 30 años y un pesado vínculo con el club. Su abuelo levantó una de las tribunas del estadio Nehín y su nombre empezó a tomar fuerza en la interna de la institución. Un tercero ‘con ganas’ y que vine a codearse entre Gustavo Ovando y Augusto Pérez.
A dos días de perder la categoría, Desamparados está que arde. Los jugadores se esparcieron, los hinchas piden que ‘se vayan todos’ y mientras el club está cerrado, aparecen las incógnitas. Con un pedido de elecciones urgentes y ante la nómina de Gustavo Ovando y Augusto Pérez, que se animan a subirse al sillón grande, apareció un tercero: un abogado y funcionario judicial de 30 años con un pesado vínculo con el club, «Tengo la intención», aseguró.
Se trata de Martín Pósleman, nieto del hombre que ‘fue presidente en el Desamparados de los Nacionales’ y que levantó la tribuna alta del Estadio José Nehín. «Mi abuelo quizás es el último presidente que hizo obras infraestructurales por el club y el fundador de la escuela de fútbol del club que supo ser uno de las más importantes de San Juan»
Sobre cómo surgió la idea de mantener un contacto más cercano con el club del barrio Patricias Sanjuaninas y llegar a ser uno de los postulantes al sillón grande, afirmó que fue ‘desde diferentes sectores, de capital, o de Desamparados mismo’: «Me han preguntado si me interesaría participar de la parte dirigencial. A mi siempre me ha interesado eso y verlo como está de destruido me da ganas de participar y convocar la mayor cantidad de gente que se pueda».
Pósleman fue crítico y relató: «Leí lo que les dijo Valiente, de que el que venga va a tener que poner plata y la verdad que no me sorprende para nada. A la vista está cual es la situación del club, un club que ha necesitado la ayuda de la Secretaría de Deportes para hacer la tribuna que le faltaba, q ue no pudo siquiera reemplazar las bombas para poder regar el pasto, que tuvo que hacer de local en un estadio prestado porque al club no lo tenían en condiciones para poder mantener la localía, que gasta la mayoría de su presupuesto deportivo en un plantel que no da respuestas porque han jugado 30 fechas y solo han ganado 4 y han terminado en el descenso.
A raíz de eso, el abogado y funcionario judicial continuó: «Por supuesto que hay que poner plata, está clarísimo. Un concepto de perspectiva dirigencial no es la misma que tiene el presidente Valiente. Naturalmente me da la sensación que el que se tiene que meter la mano en el bolsillo no puede ser ni el presidente ni el socio común, si no que el club tiene que buscar los avales, sponsors y capital privado para que financie al club, y así poder generar un proyecto de infraestructura deportiva y a partir de ahí un proyecto de desarrollo»
Por último, Pósleman, que ahora aparece en la misma línea que Gustavo Ovando y Augusto Pérez, señaló qué es lo que necesita Desamparados para empezar a acomodarse: « Lo primero es recuperar la infraestructura, poner en valor la escuela de fútbol, recuperar la cancha a como estaba o como lo supo estar en un momento. Recuperar la localía, y a partir de ahí, y con las cartas jugadas con el proyecto deportivo, ver si se puede armar un plantel competitivo. Pero lo primero que tiene que pasar, es que el club esté en condiciones, hay que buscar plata, no hay duda. Mi sensación es que la plata la tiene que poner el empresariado. Hay muchos empresarios dispuestos a colaborar con Sportivo, a colaborar como lo han hecho toda la vida. Creo que también, en un gobierno que ha sido re contra activo en materia deportiva, que nosotros estemos así, es desesperante».
Fuente: tiempodesanjuan – Nota redactada por Antonella Letizia