El domingo 13 de octubre alrededor de las 18:30 una pizzería ubicada en el barrio Parque Capital de la Ciudad de Córdoba explotó provocando el derrumbe total del local y tres heridos de levedad.
Diego, propietario del negocio, explicó ante los medios que el siniestro fue causado por una garrafa que le habían instalado el mismo día: “Me vendieron una bomba”, dijo.
Durante los momentos previos al estallido, el dueño era el único dentro de las instalaciones: “Prendí un horno de mi negocio para cocinar y sentí un poco de olor a gas, no sabía bien de dónde venía. A simple vista, era del garrafón de 45 kilos. Observo que cada momento salía más y más gas y veo que se salió la válvula, la rosca para abrir y cerrarla. Esa llave salió despedida”.
En diálogo con el programa local ‘El Show de la Mañana’, el damnificado explicó que esa garrafa se la habían instalado “ayer” (domingo) y que “Ecogas tiene que responder por eso o el gasista que mandó”.
“Era verdad que yo tenía suspendido el servicio del gas, porque estaba refaccionando todo mi negocio, pero ellos me vendieron a mí una bomba, porque a mí a esa garrafa me la trajeron”, se quejó.
La pizzería -de nombre Santorini y apostada sobre Av. Fuerza Aérea al 1800- quedó prácticamente en ruinas pero afortunadamente no hubo que lamentar víctimas: “Están las cámaras del banco que filmaron todo. Le dije al señor de la parada del colectivo: ‘Salga porque esto va a explotar’. Yo estuve de la explosión a uno o dos metros. No entiendo cómo a mí no me pasó nada. De milagro no sufrí ningún daño”, relató Diego.
Ahora, aseguró que su abogado iniciará acciones legales contra la empresa prestataria de gas.