Evo Morales brinda una conferencia desde México tras haber sido recibido como un asilado político en ese país después de la denuncia del golpe de Estado.
El ex presidente boliviano relató cuáles fueron los hechos que llevaron a su renuncia: “Al día siguiente de las elecciones, partidos cívicos anunciaron fraude y quisieron quemar tribunales departamentales y actas de escrutinios”.
En ese marco, aclaró que “nunca en mi vida he pedido a instituciones o autoridades que hagan algo ilegal”.
“Los cívicos cruceños anunciaron que el martes 29 era el golpe. Pero esa semana fracasaron”.
Evo Morales también se refirió al accidente que tuvo en su helicóptero presidencial días antes que se desatara la crisis institucional y aseguró: “Ahora me doy cuenta que el accidente en helicóptero no era casual. Quiero que se investigue ese accidente”.
“El 8 de noviembre la policía se repliega y se concreta el golpe”.
Además, se encargó de apuntar directamente contra la Organización de Estados Americanos (OEA) a partir de la publicación del informe que denuncia “irregularidades” en las elecciones que dieron ganador a Morales en primera vuelta: “Cuando dijeron que había fraude, yo no tuve problema en que vinieran a verificar instituciones u organismos internacional técnicamente si había fraude, entre ellos la OEA. Lo de la OEA, más que un informe era una interpretación”.
El ex presidente también cuestionó la resolución que tomó la OEA sobre convocar a nuevas elecciones: “A partir del informe a lo sumo se tendría que haber llevado a cabo una segunda vuelta, no nuevas elecciones. Fue un informe político”.
Hasta el momento, se registraron 8 muertos tras la renuncia de Evo Morales por los enfrentamientos que se produjeron en las calles entre los defensores y los opositores al ex presidente: “Quise comunicarme con Luis Almagro para decirle que con ese informe iban a llevar a una matanza en Bolivia, que revisen en el informe porque estaban incendiando al país”.
“Hasta que renuncié no ha habido bala contra mi publo”.
Aclaró que su renuncia no fue voluntaria sino que estuvo dada por presiones externas: “¿Por qué la renuncia? Porque antes de la renuncia habían quemado las casas de nuestras familias. La policía llegaba para apagar, pero nunca para proteger”.
“Ahora que renunciamos, ¿Por qué siguen con la violencia? Convocamos a nuevas elecciones, pero ni eso alcanzó. Durante nuestro gobierno hemos equipado a la policía y las Fuerzas Armadas, pero nunca pensé que este equipamiento iba a ser usado contra el pueblo boliviano”.
“A los oficiales, no se manchen con la sangre del pueblo. El pueblo no se para con bala, tiene mucha conciencia”.
“Mi gran delito es ser indígena. Este es un problema de clases”