En el día de hoy se va a reanudar el juicio oral por lavado de dinero conocido desde los medios de comunicación como “la ruta del dinero k” y que tiene al empresario Lázaro Báez, junto a otra veintena de personas, sentado en el banquillo de los acusados.
En la sala AMIA y ante el Tribunal Oral Federal Nº 4 (TOF 4) declarará Báez, quien está detenido desde hace tres años y medio (abril de 2016) con prisión preventiva a partir de lo que el juez Sebastián Casanello dispuso después de que el dueño de Austral subiera a un avión sin plan de vuelo.
Fue hace tres semanas que Báez, acusado de lavar 60 millones de dólares provenientes de actividades ilícitas, había transmitido desde su defensa la voluntad de declarar en el juicio en cuestión.
Uno de los ejes centrales del caso pasa por los fondos a nombre de Lázaro encontrados en cuentas en suiza y a partir de sociedades creadas en Panamá. En adición a este punto también hay una fundación que transitó movimientos por 60 millones de dólares.
El otro frente destacado son las imágenes en las que, con la presencia de su hijo Martín, Báez figura en la financiera SGI (la cual según la declaración indagatoria de Federico Elaskar se habría comprado con plata del empresario) donde se contaron alrededor de cinco millones de dólares.
Recordemos que entre los imputados en esta causa están también el contador Daniel Pérez Gadín, Federico Elaskar, Julio Mendoz, Fabián Rossi, Eduardo Castro y Martín Andrés Eraso.
Se estima que el dueño de Austral pueda explicar que el origen de los montos de las cuentas en Suiza responden a una evasión cambiaria pero no provienen de ninguna actividad ilícita.