Finalmente, antes de la feria judicial, la Justicia de Río Negro imputó a cuatro médicos del hospital Francisco López Lima por el delito de homicidio culposo por la muerte de la joven mamá sanjuanina Stella Maris Vega. El fiscal Luciano Garrido presentó argumentos por los que los profesionales Alejandro Gomel, Carolina Aguiar Sucha Souza, Sabrina Palmieri y Gina Santiago Bollati deberán responder en un juicio por su responsabilidad.
Según la acusación fiscal, “la señora Vega se internó el 10 de julio en el nosocomio para someterse a una operación de ligadura de trompas de Falopio, a través de una laparoscopía. La misma fue concretada, pero registró dolor abdominal y fue intervenida nuevamente, ingresando en la Unidad de Terapia Intensiva con shock séptico, produciéndose su deceso el día 14 de julio a las 10:48 de la mañana por un paro cardiorespiratorio”. La muerte de Vega se produjo cuatro días después de la cirugía, y después de que su esposo la llevara en reiteradas ocasiones al hospital, explicando que sentía fuertes dolores y fiebre.
El sustento probatorio con que cuenta la fiscalía para esta instancia procesal es, entre otros, la denuncia penal realizada por la pareja de la víctima, la autopsia realizada por el Cuerpo de Investigación Forense, las copias de los estudios de laboratorio e historia clínica, el informe de revista respecto de la condición de médicos de los imputados, destacó el portal ANR, en base a información del Ministerio Público Fiscal.
Tanto la defensora pública penal, Flavia Rojas, como el resto de las defensas particulares no presentaron objeciones a la formulación fiscal y los médicos se abstuvieron de declarar en esta instancia. Tras ello, el juez de Garantías interviniente, Julio Martínez Vivot, tuvo por formulados los cargos por el delitos de “homicidio culposo” (Art. 45 y 84 del Código Penal) y estableció un período de investigación de 4 meses.
El caso
Stella Maris Vega tenía 37 años, estaba casada y tenía 3 hijos. En julio, ingresó al hospital Francisco López Lima para realizarse una ligadura de trompas mediante cirugía laparoscópica. Días después falleció. La familia presentó la denuncia ante la Justicia.
Stella tenía un hermano mayor y una melliza. Era mamá de tres niños de 5 y 2 años y de 3 meses, a los que amaba y cuidaba permanentemente. Su esposo es chileno pero él y toda su familia están radicados en Río Negro, por eso ella decidió ir a vivir allí. Pero su familia se quedó acá en San Juan y con ellos tuvo contacto permanentemente, haciendo que la distancia se acortara gracias a las comunicaciones.