Finalmente, el juez Guillermo Adárvez, a cargo del Tercer Juzgado de Instrucción, decidió enviar al Servicio Penitenciario Provincial al sujeto que habría violado y maltratado a su propio hijo. Según trascendió, el magistrado lo llamó para indagarlo y, luego de ello, ordenó que lo trasladaran hacia el Penal de Chimbas. El hecho ocurrió el pasado lunes 9 de diciembre.
E. C., de 4 años, continúa internado en Terapia Intensiva del hospital Rawson con muerte cerebral. Según indicaron fuentes hospitalarias, el pequeño está en grave estado, sin reaccionar, aún no tuvo mejoría alguna y con los ojitos tapados con un antifaz, ya que tiene las córneas ensangrentadas, producto del brutal samarreo que habría sufrido por parte de su padre.
Luego, en la Policía sostuvo la versión de que el nene estuvo haciendo sus necesidades y que, al terminar en vez de limpiarlo, prefirió meterlo a bañar. Apenas sintió el agua, según su madre, se empezó a mover, trastabilló y se golpeó en la cabeza. Dijo que lo levantó y que no tenía una lesión grave, por eso lo cambió sin problemas y que el niño se quiso ir a dormir.
Posteriormente, sobre el mediodía del martes último, lo quiso despertar pero el pequeño no reaccionaba. Fue en ese momento que decidió llevarlo de urgencia hacia el hospital Rawson. Al ingresar, los médicos sospecharon de una maltrato y, cuando lo examinaron, evidenciaron lesiones en sus partes íntimas, típicas de un abuso sexual.
El juez Guillermo Adárvez, del Tercer Juzgado de Instrucción, ordenó detener al padre del chiquito ya que la investigación apuntaría a él como el principal sospechoso. Los familiares del chiquito habrían afirmado que el nene le tendía rechazo al padre. Dijeron también que al pequeño no le gustaba. El detenido está sospechado de abuso sexual contra su propio hijo.