El cuadro de Julieta Viñates, la joven que se operó de las amígdalas y luego sufrió una hemorragia, empeoró hasta un punto de no retorno. Es que durante el fin de semana los médicos declararon la muerte cerebral de la sanjuanina de 18 años, quien se encontraba inconsciente desde hace una semana.
La joven se había sometido a un procedimiento de rutina y de forma preventiva, ya que sus amígdalas le generaban constantes anginas y otras infecciones. Para evitar esta incomodidad decidió aprovechar su estadía con su familia, ya que estaba viviendo en Buenos Aires a punto de iniciar sus estudios en medicina, y extirparse este tejido.
Pero lo que iba a ser un procedimiento ambulatorio rápidamente se complicó, la joven sufrió dos hemorragias graves, la primera en su casa y la segunda en el Hospital Rawson, entró en paro cardiorrespiratorio y nunca más despertó.
En medio del dolor, la familia de la joven apunta contra el cirujano que la intervino, Maximiliano Babsia, a quien acusan de ser el responsable del desenlace. Además, desde el círculo más cercano pidieron continuar con las oraciones por la joven.